Construir una marca fuerte: la misión de tu agencia de branding
Buenos días, marca. La misión de tu departamento de marketing es construir una marca fuerte. Para ello, tendrás que diferenciarte y lograr que te recuerden, te valoren y te quieran. No estás sola. Puedes pedir ayuda y asesoramiento a una agencia de branding como Arrontes y Barrera. Recuerda que solo puedes confiar en auténticos expertos en branding. Y no, este mensaje no se autodestruirá en cinco segundos. ¡Buena suerte!
Aunque pueda parecerte la próxima entrega de Misión Imposible, nada más lejos de la realidad. Construir una marca sólida va mucho más allá de vender tu producto o servicio, se trata de crear relaciones duraderas con tus consumidores y convertirlos en los mejores defensores de tu marca.
¿Por qué es importante construir una marca sólida?
La razón más importante es que si eres una marca sólida, es más probable que los consumidores te elijan. Piensa que una marca es lo que los demás piensan que eres, cómo te ven, qué sentimientos despiertas en su interior y qué dicen de ti. Descubrirás la razón por la que van a escogerte entre la competencia. Una competencia que cada vez es más alta y unos consumidores que cada vez son más selectivos. Así que tu agencia de branding tiene que pensar en construir una marca no solamente para vender hoy, sino para conseguir vender siempre.
Si te fijas en tus propios hábitos de consumo, verás que más de una vez (y de dos y de tres) has comprado un producto solo por ser de una determinada marca. A todos nos pasa. Parece evidente que si tu marca tiene presencia en el mercado y consigue ganarse la confianza de los consumidores, estos la elegirán con mayor facilidad. Las razones suelen ser: la garantía de calidad, el prestigio e, incluso, la costumbre. ¡Resulta que muchos consumidores han confesado consumir una marca concreta de forma frecuente, simplemente por costumbre!
Si tu marca es sólida y consistente transmitirá una imagen positiva a los consumidores. Una imagen relacionada con la calidad, la credibilidad y la experiencia, que se traduce en una mayor confianza hacia los productos o servicios de la marca. De ahí a escogerlos solo hay un paso. Y ya puestos, te recordamos que crear marca no es solo diseñar un logo, por lo que si además consigues que tus consumidores te recomienden, habrás dado un paso de gigante.
De la ficción a la realidad: ¿Cómo tu agencia de branding construye una marca fuerte?
Obviamente nada se consigue de la noche a la mañana. Para poder construir una marca consistente se necesita tiempo y una buena gestión de marca.
• Conciencia de marca o cuando los consumidores ya saben que existes
Está claro que si nadie te conoce es como si no existieras. El conocimiento de marca es lo que te diferencia de los demás y te ayuda a aumentar tu cuota de mercado. Por lo tanto, podría decirse que es el principio más importante en la gestión de marca para tu agencia de branding. Así que lo mejor es empezar por potenciar aquello que te diferencia de los demás. Al fin y al cabo, ser diferente al construir tu marca logrará que te reconozcan.
Además, puede ser la oportunidad perfecta para mostrar la personalidad de tu marca. Las marcas que se diferencian priorizan lo emocional sobre lo funcional y el “por qué” sobre el “qué”. Es decir, se centran en los sentimientos que una compañía puede generar en las personas, mucho más allá de la funcionalidad de sus productos. Esta es la forma de construir confianza, humanizar a la marca y crear relaciones que la hagan memorable.
Tenlo en cuanta porque aunque el eslogan de marca puede ser una gran síntesis de la estrategia de posicionamiento de marca, como te contamos en el post: eslogan de marca, el compañero inlolvidable, por sí solo no es suficiente para crear una conciencia y un reconocimiento de marca generalizados. Una marca tiene que tener una relación abierta y honesta con los consumidores e incluso con la sociedad.
Coca-Cola, por ejemplo, no es una marca de refrescos más
• Reputación de marca o cuando les gustas y te respetan
Podríamos decir que la identidad y la imagen de marca juegan en el terreno de la relevancia y la diferenciación, en cambio la reputación de marca se centra en la legitimidad y el prestigio.
A medida que aumentas tu participación en el mercado y crece la conciencia de tu marca, comenzarás a desarrollar una reputación de marca. Si esta es buena o mala depende en gran medida de la experiencia que les brindes a tus consumidores. Sin embargo, incluso las mejores empresas pueden llevarse algún que otro susto ya que ninguna firma está libre de sufrir una crisis de reputación. Por eso, no se trata de criar buena fama y echarse a dormir, sino de vigilar con mimo qué se dice y qué se piensa de tu marca para poder actuar a tiempo.
La reputación de una marca repercute directamente en muchos aspectos, pero especialmente en su credibilidad: cuando una persona acude a comprar un producto/servicio que no adquiere de forma habitual optará siempre por una marca que goza de buena reputación antes que por una de la que no tiene referencias. Es decir, que basa su decisión de compra en la reputación de la marca.
Por eso, una oferta de una marca de gran reputación siempre es percibida como un chollo mientras que si parte de una marca poco conocida o con dudosa reputación provocará desconfianza. ¿Sabías que los consumidores llegarían a pagar hasta un 22 % más si la marca tiene una reputación positiva?
Cuando una marca goza de buena reputación:
- Su valor en el mercado es mayor
- Tiene más probabilidades de ser elegida por los clientes ante una decisión de compra.
- Atrae a socios, proveedores, inversores y talento.
- Mejora sus ventas al gozar de mayor credibilidad.
- Ahorra los costes derivados de una crisis de reputación.
- Es recomendada por sus clientes.
- Aumenta su reconocimiento de marca.
El ejemplo de Domino´s Pizza para el mes del Orgullo
• Valor de marca o cuando tus consumidores perciben que reciben más de lo que pagan por tus productos
La ventaja de tener una marca poderosa es que incita a los consumidores a buscar tu producto en el punto de venta, aunque otro sea más barato. Como puedes imaginar, el posicionamiento de la marca (el lugar que ocupa en la mente del consumidor en relación con la competencia) está directamente vinculado al valor de la marca. Y los clientes siempre están dispuestos a pagar más cuando perciben que tu producto es especial, único o mejor.
Además de cobrar más por los productos, el valor de marca también facilita la reparación de la reputación después de sufrir una crisis.
El ejemplo de Nike
El valor de marca de Nike es tan alto que a pesar de haber sufrido alguna que otra crisis, como cuando se rompieron las zapatillas de una de las estrellas de la NBA al comienzo de un partido televisado, causándole una lesión, ahora ya nadie lo recuerda. Nike demostró que el valor de marca es la mejor forma de sobrevivir a una crisis de reputación.
• Lealtad de marca o cuando tus consumidores no pueden sobrevivir sin ti
La lealtad a la marca se debe principalmente a experiencias del consumidor con tus productos y servicios. Así que si tu agencia de branding se enfoca en el consumidor y les proporciona una experiencia excepcional, además de conseguir su lealtad, estarás creando embajadores de marca y fans incondicionales. Y lo mejor de todo es que no necesitas una gran inversión. Solo mucha creatividad.
El ejemplo de Canada Goose y The Cold Room
Esta marca de ropa de invierno ha tenido la brillante idea de incluir un cuarto frío dentro de sus tiendas, un espacio pequeño donde la temperatura es de -32 grados centígrados. Los clientes pueden entrar y poner a prueba las chaquetas de la marca. Sin duda, una experiencia única.
Crear una marca fuerte es todo un reto y debe abordarse con una estrategia bien definida. En Arrontes y Barrera , tu agencia de branding en Asturias, podemos completar con éxito la misión porque contamos con una amplia trayectoria construyendo marcas poderosas, con una presencia coherente y muy cuidada en todas sus manifestaciones: del logotipo y la emoción, a la publicidad y la web. Marcas que se convierten en BrainBrands para los consumidores por su capacidad para ser reconocidas, recordadas, valoradas y adoradas.