¿Internet te vuelve superficial?
Si navegas habitualmente por internet, así es: lo sentimos pero internet te vuelve superficial.
Resulta que estamos tan ocupados buscando e intercambiando información y tenemos tanta prisa, que cuando googleamos, solo echamos un vistazo por encima. No nos concentramos y no profundizamos en nada. Y esto tiene una consecuencia inmediata en nuestro cerebro: la capacidad de cambiar nuestra percepción de las cosas, haciendo que sea más superficial.
¿Sabías que en tan solo 5 días internet te vuelve más superficial?
Según descubrió Kandel, nuestro cerebro es neuroplástico y puede experimentar cambios con solo algo de entrenamiento. Así es que la repetición puede hacer cambiar las conexiones y hábitos neuronales y, por lo tanto, la manera en que pensamos, nos comportamos, obtenemos información, vemos nuestro entorno, etc.
En Internet nuestra visión no es lineal como cuando leemos un libro, sino que lo que hacemos es saltar de objeto en objeto de forma superficial, sin detenernos mucho tiempo en nada; tal y como apuntaba Richard Nielsen, leemos en forma de “F”.
Esto tiene su lado positivo ya que se activan muchas partes del cerebro, se ayuda a la coordinación mental y a la capacidad de toma de decisiones. Pero, también tiene su lado negativo y es que al pasar tan rápido por tantas “opciones”, se impide el razonamiento, el pensamiento profundo y, por lo tanto, su comprensión.
Además de superficiales, nos volvemos adictos, nos encanta saltar de página en página, nos gusta tanto y ha tenido tal éxito que las marcas también han sabido aprovecharlo (por ejemplo creando productos como los smartphones).
“Google se dedica, literalmente, a convertir nuestra distracción en dinero”
Siguiendo con los experimentos de Kandel, otro descubrimiento muy revelador es que para que los nuevos conocimientos permanezcan en nuestra memoria deben ser procesados y razonados ¡durante casi una hora!
Obviamente, cuando navegamos en internet o cuando estamos por ejemplo en Twitter, en el mismo momento que se publica algo ya pasamos a lo siguiente.
Así, que nos quedamos sin repasar los recuerdos, no tenemos tiempo. Resulta que estamos remplazando nuestra memoria por la memoria virtual. Internet se ha convertido en nuestra mejor opción no solo para buscar información, sino también para almacenarla.
Por lo que nuestra capacidad de conocimiento, que es “lo que se recuerda, lo que se puede retener en la mente”, también cambia e Internet te vuelve superficial.
La ciencia habla claro en ese sentido: la habilidad de concentrarse en una sola cosa es clave en la memoria a largo plazo, para el pensamiento crítico y conceptual, y para la creatividad, que es lo que nos interesa. Incluso las emociones y la empatía necesitan tiempo para ser procesadas. Si no invertimos ese tiempo, nos deshumanizamos cada vez más.
Así que desconecta de vez en cuando. Lo importante no es tanto lo eficiente que uno es procesando información, sino la capacidad de pensar sin tener necesariamente un fin práctico. Eso es lo que estimula la creatividad. Te lo decimos nosotros que nos dedicamos a ello.
Si quieres profundizar más en cómo Internet te vuelve superficial te recomendamos el libro “Superficiales: ¿Qué está haciendo Internet con nuestras mentes?” de Nicholas Carr.
